"Estoy esperándote"... by Ester

Estoy esperando que llames, estoy esperando hacerle falta a tu vida, en esta hora, en este momento, idiota, no dejo de decirme y de sentirte tan dependiente de tu interés hacia  mí, fuiste tú el que me buscaste y ahora temo que te vayas otra vez, cinco años sin saber más de ti.

Estoy pensando en ti, en que quiero ver, en que quiero escuchar el sonido de tu voz tan distinto al resto de la humanidad, quiero desear poder apreciar el color de tus ojos celestes, el cual en nuestra última cita nocturna no se dejó ver.

Estoy esperando, deseando, anhelando, que sientas algo por mí y que seas sincero, que seas capaz de ver en mí, una amiga, un amor, un cariño, alguien especial, que quieras pasar los días que nos esperan rodeando con tu brazo mi espalda.

Y estoy ansiosa y el teléfono no suena, no llamas y yo me pudro un poquito con cada segundo que marca el reloj de la pared, indiferente de mis sensaciones por ti, total indiferencia que parece que entre los dos, el reloj y tú juegan a pisotear todo lo que me permito imaginar y soñar sobre nosotros dos.

Estoy resignándome a que no llamaras y casi estoy un poco contenta por ello, voy a dejar de sentir esto por ti, este sentimiento con el pasar de los días no habrá ni cenizas, ni pruebas que confirmen que alguna vez hubo dentro de mí un sentimiento hacia  ti, estoy desde este instante anhelando ver llegar esos días, mientras la inseguridad me corroe confirmando a cada momento que el celular permanece en silencio, tu desatención, tu desinterés, tu falsedad y fingido cariño por mí, poco, a poco se va haciendo añicos, y quiero llorar y quiero ver mis muñecas sangrar, porque esta es mi forma de demostrar mi dolor, porque no estoy bien, no estoy nada bien y no tiene nada que ver contigo y hasta dispuesta estaba a contarte todo, a desnudarme el alma, decirte "ven, esta soy yo" y me contuve, porque temí que huyeras y ahora que no estas, que prácticamente has huido sin ver toda quien soy, no me siento culpable, así que me libero, para no culparme y mi bolsa esta vacía, no tengo ningún beso, ningún abrazo que atesorar, con el cual dañarme diariamente al recordarte, mi bolsa esta vacía y cada esquina de los bolsillos de mi pantalón, lloran casi la falta de ellos, no tengo el sabor de tus besos, ni la textura de tu piel sobre la mía como recuerdo de que nos quisimos, solo tengo esa sensación, esas casi promesas y propuestas, esas directas e indirectas insinuaciones de que habías visto en mi una compañera para ti. Pero como vez, estoy vacía hoy aquí.

8:32pm, no hay ningún mensaje tuyo en mi celular, no estas, casi parece como si todo hubiera sido una imaginación mía, uno más de mis sueños, como el que tuve hoy antes de despertar, iba a verte , estabas cerca, a menos de 100 pasos de llegar a ti y desperté, esto parece ya un sueño, solo que fue real, que viniste, que me buscaste, me llamabas y escribías, pero hoy no estas, no estuviste ayer, ni el día detrás de ayer, no estas hoy, y mañana, no estarás a lo mejor, ni el día que viene después de mañana, estoy sufriendo ya, por los días en los que aun te estaré esperando, está doliendo ya dentro, por todas los minutos que me perdí pensando en que tú eras para mí.

Esto tiene que terminar de una vez, quiero dejar de escribirte y correr a la cuchilla, mientras ella abre franjas en mis muñecas y mi corazón con cada sentimiento por ti se va enterrando, pasando a segundo, tercer, cuarto plano, porque todo lo que siento ahora es dolor, un dolor físico, un dolor que es mil veces mejor y manejable que esta ansiedad que me produce el que no me llames, el que me hayas echado nuevamente al olvido.

Estoy sola y estoy esperando, estoy rodeada de personas, cada uno con sus luchas y alegrías, derrotas y tristezas, estoy rodeada de personas con recuerdos y dolores, pero ¿Por qué parece el mío, mayor que el de todos ellos juntos?, no es un buen momento para mí, ni acaso para todos los que me rodean, yo quería y quisiera reconfortarme en tu abrazo, yo deseaba y aun en este momento, si llamas, si vienes, si solo me das una señal de humo así sea, borraría lo escrito, porque nada de lo que hoy digo importaría, porque nada de esto sería cierto, si solo dijeras "Hola cariño" pero hay silencio en este ruido intenso de la vida, hay silencio para mí, solo puedo escuchar tu silencio.

Chico, dime que he sido una tonta al gustarme tú, dime que he sido la peor idiota de la historia por creerte esta vez, parecías tan sincero y sentía tanta química cuando estábamos juntos, me deje engañar, vi lo que quise ver y al final solo sentí lo que deseaba sentir, y eso era cariño, quería desesperadamente que alguien me amara, que alguien viera en mí, alguien especial, alguien a quien querer, anhelaba desesperadamente verme amada a través de tus ojos. No he estado recibiendo más que desinterés por parte de aquellos a los que llamo amigos, estoy sumergida en mi tristeza hasta casi ahogarme, no han sido días buenos para mí, así que cuando apareciste, desee ocultamente refugiarme en ti.

Dos minutos para las nueve, sabe Dios, que esperare por tu llamada hasta las 11 de la noche, incluso sabe mi almohada que sobre ella reposare el teléfono esperando despertarme con su timbre solo para contestar a la única persona que quiero que me llame ahora, tú, solo tú.

Mi dolor esperara hasta entonces para dejarse notar cubriendo desapercibidamente de rojo mi pijama, ruega al cielo que este dormida y atrase de esa ese modo, mi forma de desahogarme del dolor, la frustración, la ansiedad y llore delgados ríos rojos de decepción por ti.

Solo una hora y minutos más me esperan para encerrarme en mi habitación y dejar de fingirme tan normal, sacarme la sonrisa de lado a lado de la cara, y sobre mis sabanas y almohada mostrarme tal como me siento ahora, saben lo que saben esas cuatro paredes que me han visto de la peor manera en la vida, saben esas paredes, lloran también porque ellas querrían verme feliz, soñando, risueña, pero no todo lo que se desea en la vida, es posible tener, como vez, yo no te tengo a ti.

Es hora de dejar de escribir, como nunca me hiciste llegar a tu casa, no deslizare esta nota bajo la puerta de tu habitación, ni acaso, si vuelves a mí, te haré saber de su existencia, es solo algo que necesitaba decir, algo que quería que supieras este momento, pero como bien te dije más adelante, si no vienes hoy, sé que dentro de unos días, tú solo será un vago recuerdo de mi idiotez al pretender enamorarme de ti, solo me quedara ese recuerdo absurdo de mi estupidez, solo eso al final, tendré, por lo tanto, bye.

                                                                                                           (Anonina - Ester) 

Nota de las Creadores del Blog: Gracias Ester por compartir tu historia con nosotros y gracias por que cuando nos mandaste este correo nos confirmaste que no lo habías hecho, que mientras escribías esta nota, de desahogaste. Sigue por favor compartiendo más experiencias tuyas con nosotros, es grato leerte.